tag:blogger.com,1999:blog-6869223027077998233.post1634372696823595952..comments2024-01-14T17:05:55.984-03:00Comments on La Puerta Angosta: Visión de Santa Catalina sobre el Bautismo de Sangrelapuertangostahttp://www.blogger.com/profile/08273307052368826381noreply@blogger.comBlogger2125tag:blogger.com,1999:blog-6869223027077998233.post-49174576684089403372016-11-04T18:10:09.751-03:002016-11-04T18:10:09.751-03:00En Negritas se ve de corrido la cita completa que ...En Negritas se ve de corrido la cita completa que aparece en tu post pero sin las menciones al supuesto Bautismo de Sangre y Deseo que están como intercaladas en medio de toda la cita<br /><br />además en cursiva resalto lo que contiene toda la obra de "Diálogos": que a través de bautizo recibimos la gracia de Dios por virtud de su Sangre Redentora. <br /><br />También en cursiva noto como bien se enseña la doctrina del la contrición perfecta con el deseo del sacramento de la penitencia, pero nada del bautismo de deseo y sangre<br /><br />¿Será este libro de 1759 aducido como diálogos de Santa Catalina por lo que el antipapa Pablo VI la "nombró" "doctora de la Iglesia".?<br /><br />Espero en Dios esto te pueda ser de ayuda, quedo a tu servicio<br /><br />FIAT<br /><br />lic.hectorromero@gmail.com<br /><br />-- <br />No tengo más Patria que el Paraiso Celestial desde el eco del Paraiso Terrenal, ni más bandera que la CruzHector Adrianhttp://www.vaticanocatolico.comnoreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-6869223027077998233.post-55133885417857524632016-11-04T18:09:03.143-03:002016-11-04T18:09:03.143-03:00Gloria al Padre y al Hijo y al Espíritu Santo
Hol...Gloria al Padre y al Hijo y al Espíritu Santo<br /><br />Hola al revisar directamente la obra el Dialogo de Santa Catalina me tope con que la cita que hace este autor de 1790(la publicada en el post), añadiendo la supuesta revelación por parte de Dios Padre de la existencia del bautismo de deseo y sangre no concuerda con la de la obra original de Santa Catalina de Siena, por lo que esta añadidura y otras que no concuerdan son falsas y por lo tanto no tienen valor.<br /><br />Esta es la cita original que podrás comprobar bajando cualquier PDF de "El Dialogo" de Santa Catalina de Siena<br /><br /><b>"En el costado de Cristo crucificado conoce el fuego de la caridad divina, que es<br />lo que te manifestó mi Hijo cuando le preguntaste: «¡Oh dulce e inmaculado<br />Cordero! Tú estabas ya muerto cuando te abrieron el costado, ¿por qué quisiste<br />que se te hiriera y se te abriera el corazón?» Él respondió, si te acuerdas:<br />«Muchas razones había para ello, pero te diré la principal. Mi deseo para el<br />linaje humano era infinito, y el acto de pasar penas y tormentos era finito. Por<br />esto quise que vieseis el secreto del corazón, mostrándolo abierto para que<br />comprendierais que amaba mucho más y que no podía demostrarlo más que<br />por lo finito del sufrimiento.<br />Yo conocía la debilidad y fragilidad del hombre, que le lleva a ofenderme. No<br />que se vea forzado por ella ni por ninguna otra cosa a cometer la culpa, si él no<br />quiere, sino que, como frágil, cae en culpa de pecado mortal, por la que pierde<br />la gracia <i>que recibió en el santo bautismo en virtud de la Sangre de mi Hijo</i>. Por esto fue necesario que mi Caridad divina proveyese a dejarles un bautismo continuo, el cual se recibe con la contrición del corazón y con la santa<br />confesión, hecha a los pies de mis ministros. La Sangre de Jesucristo es la que<br />hace deslizar la absolución del sacerdote por el semblante del alma.<br /><i>Si la confesión es imposible, basta la contrición del corazón</i>. Entonces es mi<br />clemencia la que os da el fruto de esta preciosa sangre. Mas, pudiendo<br />confesaros, quiero que lo hagáis. Quien pudiendo no se confiesa, se ha privado<br />del precio de la Sangre del Cordero. Es cierto que en el último momento, si el<br />alma la desea y la puede haber, también la recibirá; pero no haya nadie tan loco<br />que con esta esperanza aguarde a la hora de la muerte para arreglar su vida,<br />porque no está seguro de que, por su obstinación y en mi divina justicia, no le<br />diga: «Tú no te acordaste de mí en vida, mientras tuviste tiempo, tampoco yo<br />me acuerdo de ti en la hora de la muerte». Que nadie, pues, se fíe, y si alguien,<br />por su culpa, lo hizo hasta ahora, no dilate hasta última hora el recibir este<br />bautismo.<br />En este bautismo continuo el alma conoce que el tormento de la cruz que<br />padeció mi Hijo fue finito, pero el fruto que de él habéis recibido es infinito, en<br />virtud de la naturaleza divina unida a la humana. Es infinito el fruto, no porque<br />lo sea el sufrimiento que yo sufrí con tanto fuego de amor, sino porque el deseo<br />de vuestra salvación era infinito. Si no hubiese sido infinito, no habría sido<br />restaurado todo el género humano, ni el hombre podría levantarse después de<br />su pecado. Estos lo manifesté dejando abrir mi costado, donde halláis los<br />secretos de mi corazón, demostrándoos que os amo mucho más de lo que<br />puedo manifestar con un tormento finito.</b>Hector Adrianhttp://www.vaticanocatolico.comnoreply@blogger.com